Del
amor y otras criaturas
Reseña
crítica de la película The shape of water
Por: Alejandrina Castañeda
Los monstruos,
cuando aparecen, pueden ofrecernos el fugaz esplendor de la belleza.
Vicente Quirarte
Monstruos, criaturas, seres salidos del
infierno, del agua, de la mitología; son el principal leit-motive en la filmografía del director mexicano Guillermo del
Toro. The Shape of water (2017), Crimson
Peak (2015), Pacific Rim (2013), Hellboy
2 (2008), El laberinto del fauno (2006).
Lo que
sucede en The Shape of watter, es una
historia de amor, al parecer muy poco común, sin embargo, en realidad se ha
presentado en varias ocasiones; sí, enamorarse del “otro”[1]
es un tema recurrente dentro de lo fantástico, sea cine o literatura. Pero que quede claro que lo que voy a
analizar es la forma en la que Guillermo del Toro nos cuenta una historia que
hemos visto muchas veces[2]
y que, igual que pasaba con historias como Las
troyanas, Electra, Romeo y Julieta o Fausto; el principal objetivo era el impacto que lograría el
dramaturgo o director sobre una historia que todos los griegos, ingleses o
alemanes ya conocían muy bien, por lo tanto, se sabía que eso era un reto aún
mayor.
El
encuentro con “el otro”, con lo desconocido, la atracción, comunicación,
curiosidad…el encanto de un humano hacia una criatura. Pasó con Splash, también era una criatura del
agua, de origen mitológico, una sirena, y ya se había visto a un anfibio
enamorarse de una humana en La mujer y el
monstruo (1954). Querer experimentar con una criatura…también pasa con E.T.
que por cierto emana luz de su dedo para aliviar heridas así como este anfibio
de la película emana luz azul con las mismas facultades curativas.
Comunicación
y ayuda mutua, la criatura anfibia ayuda a conocerse a sí mismo y a exponernos
como humanos en la falta de amor y compasión por el prójimo, por otro ser vivo
y los protagonistas a ayudarlo a regresar al agua, a su hogar “E.T. phone
home”, Madison (Splash) y el hombre
anfibio (The Shape of water) deben
regresar a su casa antes de que mueran.


Todos estos personajes
para Del Toro son como personajes de fábulas, humanizados, criaturas que
transmiten sabiduría, amor, que reaccionan, que se comunican, que nos salvan,
nos protegen, nos curan, todos ellos, incluso los que vienen del mismo
infierno. “Nuestro lema es: más humanos que los humanos”
v Los protagonistas terminan amando lo diferente.
Hay un hilo conductor entre
varias historias que nos ha contado la cinematografía sobre la violencia hacia la criatura y es que antes
de estudiarlo o tratar de entenderlo lo maltratan, y es claro el resultado:
violencia genera más violencia (The Shape
of water, King Kong, Maleficent, The Beast and the Beuty, Cuasimodo,
la criatura de Frankeinstein, Stich, Hulk.)
Aunado al instinto, a su forma de vida aislada, juzgados, temidos, segregados,
se les trata con violencia, justo es lo que regresan; esto pasa hasta en los
humanos.
Trevor
Bruttenholm (padre adoptivo de Hellboy), Elisa Esposito y Ofelia logran ver el
interior de los seres que aparecen en su vida, ese encuentro que significa su ruptura
de equilibrio, el cambio hacia algo que se convertirá en lo más maravilloso que
les pudo pasar. Tienen la fortuna de convivir con seres fantásticos, de
encontrarlos, de amarlos, enseñarlos y cuidarlos.
v
La criatura termina
enamorándose del humano.
Aunque no siempre con
buenos resultados, las criaturas o monstruos terminan siendo vulnerables ante
el encanto también del “otro”, guiados tal vez por la empatía, la comprensión,
necesidad de proteger aquello que en vez de violentarlos trataron de buscar
algo en ellos. King Kong (1933),
Creature from Black Lagoon
(1954), Splash ((1984) Hellboy (2004), The beauty and the beast (2017) Gravity
Falls (2016) etc.



v
La actuación
Realizar la creación de
personaje de una mujer sordomuda, representa toda una complejidad, ya que su esencia
es mostrar sus sentimientos únicamente con el lenguaje de sus manos. Podemos ver a una Elisa Esposito[3]
muy bien adaptada a su rutina de vida: bañera, masturbación, huevos cocidos,
laboratorio y televisión, la trayectoria de su personaje es interesante, pues
después de conocer a la criatura que representará todo lo que anhela, todo lo
que el amor puede dar a alguien diferente como ella siempre se ha concebido;
aparece el coraje, el enojo, la valentía, la decisión de cambiar totalmente su
vida.
Hay
que recordar que sólo a personas “extraordinarias” les pasan cosas “extraordinarias.”[4]
Alicia, Dorothy, Bastian, Sara, Ofelia, Elisa Esposito.
v
Los malos.
Personajes similares
por su carácter fuerte, a ambos les pesa el “deber” seguir órdenes de sus
superiores, reflejo de una disciplina enfermiza en sus propias vidas, sin
escrúpulos, de una sola pieza, sin matices, sin concesiones, traumados por
algún suceso de su pasado. ¿Quién es el monstruo realmente?


v
Metaficción
Cine dentro del cine en forma de
homenaje al cine clásico, nostalgia de Hollywood en la época en donde estaba
predestinado a convertirse en la industria más poderosa del entretenimiento
mundial transformándose en “la civilización del espectáculo”. Elisa Espocito y
su amigo artista Giles viven justo arriba de un cine, y dentro de su hogar
siempre está el ambiente de la ilusión viendo comedias musicales por T.V.
Querían ser parte de
esas películas, cuya historia mostraba un romance de ensueño. En la película
percibimos, en varias ocasiones, la afición de Elisa Esposito viendo en su
televisor escenas con Shirley Temple bailando tap en The Little colonel (1935).
v El sello de Guillermo
Del Toro
EL COLOR.
En esta ocasión hay un
énfasis en el color verde[5]
durante toda la película; pastel de limón, el cartel que le piden a Giles debe
estar en tonos de verde, el laboratorio está ambientado en tonos verdes, el
uniforme que usa Elisa para limpiar e incluso los atuendos que usa del diario,
el carro que se compra Strickland, las hojas con que debe cubrir al anfibio
para sacarlo de ahí, las tarjetas para
checar entrada y salida del trabajo, los globos, los anuncios, la gelatina. El
color ayuda a representar la esencia del protagonista, ya que ese color
simboliza su especie, su interior, su ambiente; lo mismo pasa con los tonos
rojos en Hellboy.








LOS
MONSTRUOS O SERES FANTÁSTICOS








LOS GATOS.
Que se encuentran en Trollhunters, Hellboy, y The Shape of water,
así que supongo que al igual que a Remedios Varo, estos felinos deben estar
siempre presentes. [6]
AMBIENTACIÓN
Es una película
estéticamente bella y gótica al mismo tiempo. Tonos oscuros y profundidad de
campo en las estancias por donde deambulan los protagonistas. Los pasillos son
como un recorrido emblemático por el que tienen que transitar los personajes,
un pasillo por el hogar, por lo desconocido, por lo amenazador.






LOS ZAPATOS ROJOS
Dorothy, Ofelia, Mako
Mori y Elisa los usan, el momento no es cualquiera, es un momento emblemático,
son un símbolo de transición en su vida. Los zapatos rojos te regresan a tu
casa, a tu reino, a la seguridad, al amor. De Hecho Elisa Esposito cambia su
ropa de verde a rojo justo después del primer encuentro (“cercano del tercer
tipo”) con el Dios acuático.[7]




v
Y SI TE DAS CUENTA
Nosotros, los
espectadores de la cinematografía de Del Toro no caemos en un mundo de
fantasía, como Dorothy, Alicia, Coroline Jones; mas bien las criaturas salen de
su mundo a nuestro encuentro: Hellboy, El fauno, El hombre-pez, los trolls.
Elisa Esposito y Ofelia
tienen muchos detalles en común:
“Si hablara de ello…Si
lo hiciera…¿Qué les diría, me pregunto? ¿les contaría sobre el momento? Ocurrió hace tiempo al
parecer… En los últimos días del reinado de un justo Príncipe…¿O les hablaría del lugar? Una
pequeña ciudad cerca de la costa, pero lejos de todo lo demás…¿O no sé les
hablaría sobre ella? La
Princesa sin voz…O tal vez quisiera advertirles de la verdad de estos
hechos y de la historia de amor y pérdida, y del monstruo que trató de
destruirlo todo.”
La forma del
agua
“Cuentan que hace mucho mucho tiempo
en el reino subterráneo
donde no existe la mentira, ni el dolor, vivía una princesa que soñaba con el mundo de los humanos,
soñaba con el cielo azul, la brisa suave y el brillante sol. Un día burlando
toda vigilancia, la princesa escapó. Una vez en el exterior la luz del sol la
cegó y borró de su memoria cualquier indicio del pasado. La princesa olvidó quién era, de dónde venía.
Su cuerpo sufrió frío, enfermedad y dolor. Y al correr de los años murió. Sin
embargo, su padre, el Rey,
sabía que el alma de la princesa regresaría quizá en otro cuerpo, en otro
tiempo y en otro lugar, y él la esperaría hasta el último aliento, hasta que el
mundo dejara de girar.”
El laberinto del fauno
¿Coincidencias?, seguro
que nada está demás en una película, todo se relaciona, cada detalle tiene un
significado específico en sí mismo y al mismo tiempo con la idea global.
Nos deja la sensación
de que ellas no pertenecían al mundo de los humanos y que con éste mágico
encuentro pudieron volver a su lugar de origen; después de todo, ambas (Ofelia
y Elisa) tienen marcas de nacimiento en su cuerpo que revelan su verdadero yo.
Existe
entonces en la toda la creación de
Guillermo del Toro un cruce constante de dos mundos, el real y el fantástico
que se nos presentan en un vaivén constante de relatos estéticos originales en
sí mismos y sin dejar de lado la admiración a lo clásico.
El mismo director ha dicho en
constantes ocasiones que para él los monstruos le han salvado en varios
aspectos de su vida misma, como sus criaturas fantásticas le salvan la vida a
los protagonistas. Así resulta que los
verdaderos monstruos, los verdaderos entes que hacen daño son otros. “El amor es el mayor de los monstruos”.[8]
[1] “Otro” como alguien o algo distinto.
[2] El tipo de análisis es intertextual principalmente, ir tejiendo
las redes que conectan las diversas imágenes que devienen de múltiples medios
audiovisuales. Un “texto” siempre nos
lleva a otros.
[3] Interpretada por la actriz Sally Hawkins
[4] En mi obsesión por la intertextualidad, he encontrado (seguro que
no seré la única) la relación entre la lectura y los personajes a los que les
suceden cosas maravillosas, porque son personas “raras” porque lo mejor de su
vida está en su imaginación así que no son como el común denominador.
[5] El verde es color de agua. Neptuno, escribe Winkelman, “si su
figura nos hubiese llegado en lienzo,
tendría un vestido verde de mar, como se acostumbraba a pintar a las Nereidas y
en fin, todo lo que tenía relación con los dioses marinos”.
[6] No son tan afortunados en Caza
troles, pues un goblin se come a uno que encuentra en un basurero, y en La forma del agua…pues el anfibio se
come a uno también.
[7] En la tradición occidental el calzado simboliza al viaje, no sólo en
dirección al otro mundo (el de los muertos) sino en todas las direcciones. Es
el símbolo del viajero. Rojo: color de fuego y de sangre, el rojo es para
muchos pueblos el primero de los colores, por ser el que está ligado más
fundamentalmente a la vida. Diccionario de símbolos.
[8] La cumbre escarlata (2015). Ese es el que realmente ha hecho daño
en m ás de una
ocasión. O al menos eso es lo que dicen…
Excelente miss, recién estoy visitando su blog que nos dio a conocer en el salón de clases. Gracias por estas 7 semanas fantásticas donde cambio mi malos antecedentes de la literatura tomando gusto e interes en la materia que mas me desagradaba.Estuve en primera fila durante su despedida en el grupo 4, espero que pronto publique su primer blog de este año y le vaya mas que bien. :)
ResponderEliminar👌👌👌
ResponderEliminarmuy buena reseña, no he tenido la oportunidad de ver la película pero leyendo la reseña, me dieron ganas de verla, me resulta interesante la relación que existe con todas las películas y series incluso con algunas a animadas. a mi parecer está muy completa, y no te da spoilers.
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